En 1977, una señal del espacio desconcertó a los astrónomos
A lo largo de los años, han surgido varias hipótesis sobre su origen.
En 1977, se produjo uno de los eventos más intrigantes en la búsqueda de vida extraterrestre. Durante una observación rutinaria en el Radio Observatorio Big Ear, ubicado en Ohio, los astrónomos captaron una señal inusualmente fuerte que provenía del espacio. Este fenómeno, que duró solo 72 segundos, sorprendió a la comunidad científica por su singularidad y naturaleza inexplicable.
La señal fue tan peculiar que Jerry Ehman, un astrónomo que analizaba los datos, quedó tan asombrado que escribió en el papel “Wow!”, un gesto que se convirtió en el nombre que hoy se le conoce: la “Señal Wow!”. La característica más desconcertante de esta señal es que no se ha vuelto a detectar algo similar, a pesar de los esfuerzos continuos por parte de los científicos para encontrarla nuevamente.
La señal se originó en una región del espacio donde no se esperaban emisiones tan intensas, y su frecuencia no coincidía con ninguna fuente conocida, como los satélites o los reflejos de la Tierra. Su naturaleza era completamente desconocida, lo que impulsó teorías sobre su posible origen extraterrestre. Sin embargo, a pesar de las investigaciones exhaustivas, no se ha logrado proporcionar una explicación definitiva.
A lo largo de los años, han surgido varias hipótesis sobre su origen. Algunos científicos sugieren que la “Señal Wow!” podría ser una señal proveniente de una civilización extraterrestre avanzada, dado que sus características no se ajustan a los patrones comunes de las señales espaciales. Aunque esta teoría sigue siendo solo una especulación, la señal permanece como uno de los mayores misterios no resueltos en la astronomía moderna.
Hoy se cumplieron 47 años de la detección de la señal de rqdiofrecuencia más extraña que hayamos recibido del espacio exterior. Se trata de la señal denominada "Señal Wow".
— Gaston Giribet (@GastonGiribet) August 16, 2024
El 15 de agosto de 1977, a las 23:16 hs el radiotelescopio Big Ear del radio observatorio de Ohio pic.twitter.com/CA4crjPNgB
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La “Señal Wow!” no solo ha dejado una huella indeleble en la historia de la ciencia, sino que también ha alimentado la fascinación por la posibilidad de vida en el espacio exterior, un tema que sigue siendo objeto de debate y exploración.
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